logomarwasvg

MI CUENTA

¡Viene Marzo! ¿Y yo qué hago?

Marzo siempre implica un nuevo comienzo. Comienza un ciclo académico, administrativo, lo que sea. Marzo, en Chile, es indicador de que empieza una «unidad temporal». Y ahora que nuestras realidades son tan diferentes a como habría sido sin pandemia, puede ser fácil compararse con otras personas y cuestionar nuestras decisiones.


Algunas personas comienzan trabajo presencial, otras semi presencial, otras completamente online (lo que significa más meses de encierro).

Otras personas tomarán prácticas nuevas, estudiarán, tomarán cursos, diplomados.

Y otras personas están sin saber muy bien qué hacer, pero sintiendo que viene marzo igual.

Otras personas aún no se recuperan del año pasado. Aún no tienen claro qué quieren hacer y cómo quieren vivir este nuevo año de pandemia. Y les causa ansiedad cuando ven a otras personas adaptarse o moverse «tan fácilmente».

Este escrito es para quienes están en confusión, ansiedad, indecisión y que, sin querer, igual se comparan con la amiga o la colega… y eso les produce más rollo mental.


Lo que primero te diría si estuvieras aquí conmigo, frente a frente, es esto:

1) Querida mía… inhala…exhala… y no te tomes a la ligera lo que estás sintiendo. Intenta no juzgarte ni criticarte.

Estamos en una pandemia mundial. Esto es realmente histórico. Estamos viviendo historia, que saldrá en los libros de historia y que habrá gente relatando cómo fue la última pandemia que vivió la humanidad… No es cualquier cosa.

La única razón de que te estás cuestionando a ti misma, es porque los últimos años nos acostumbramos a la cultura de lo inmediato. Entonces realmente creemos que tenemos que tener una respuesta inmediata, una solución inmediata, tener una flexibilidad mental y emocional inmediata y que tenemos que superar el shock de manera inmediata.

La cultura de la inmediatez y de la poca inteligencia emocional, la cultura en donde sacamos nuestras dopaminas (hormonas felices) de las redes sociales.

Pero NUESTRO CUERPO y nuestra mente sigue siendo la misma desde hace millones de años. Nuestro cuerpo tiene procesos y nuestra mente también.

Y esos procesos no siempre son «inmediatos». Todo lo contrario.

Entonces no es raro sentirse confundida. De hecho, es completamente normal, porque NUNCA habíamos vivido esto. No hay persona viva en el planeta que haya vivido esto.

Es una novedad y, sinceramente, el año pasado fue de cambios tan, tan violentos, que muchas personas recién sienten que se están recuperando. RECIÉN se están recuperando.

Muchas nos preguntamos: «¿Y yo, qué voy a hacer?» «¿Cómo voy a trabajar?» «Mis amigas ya están saliendo, están tomando cursos, están trabajando así, asá, están viajando, están haciendo vida social…», «Quizás puedo empezar mi emprendimiento»…

Muchas de estas preguntas vienen por comparación. Por eso, es importante ENTRAR.

2) Entrar y tomarnos un minuto para realmente sacar el ruido mental y sentir… qué es lo que deseamos NOSOTRAS. 

Qué queremos, qué necesitamos. Qué me dice mi cuerpo. Qué me dicen mis entrañas. Qué deseo. Qué necesito YO.

Quizás, en vez de hacer algo nuevo o embarcarte en un proyecto, lo que necesitas es ordenar tu casa, botar bolsas y bolsas de basura, cachureos y ropa vieja. 

Quizás necesitas enfocarte en temas de salud.

Quizás necesitas terminar proyectos pendientes que te están molestando ahí atrás en tu mente y te producen cierto dolor de estómago o ansiedad.

Quizás necesitas enfocarte en cosas básicas de autocuidado, como dormir mejor, comer mejor, hidratarte más y hacer algo de movimiento diario.

Entra en ti y realmente pregúntate qué necesitas TÚ. Sin comparaciones. Sin pensar que «te estás perdiendo de eso, esto, eso y esto y que las otras personas sí lo están haciendo…»

3) En el planeta hay un montón de gente sufriendo, por lo tanto es normal sentirse rara, con pena, desequilibrada.

Por eso es tan importante entrar y alinearnos. Calibrar nuestra energía y tomarse unos varios minutos, horas, para equilibrar el interior y escucha realmente nuestras necesidades personales.

Cuando una se compara, una está calibrando con las demás personas y nuestra mente crea «necesidades» que realmente no son nuestras y aparece la voz del «deber ser», del «pertenecer», del «ahhh, yo igual».

Calibrar hacia adentro y ser honesta con una misma, con lo que UNA realmente quiere y necesita. 

4) Cuando lo tengamos claro… diseñar un calendario, o un «plan» o una «estrategia», como quieras llamarlo, que esté DISEÑADO para el ÉXITO.

Qué quiero decir con «éxito»: que nuestro pan sea realista, amoroso, que tome en cuenta nuestros ciclos, que tome en cuenta la flexibilidad por si hay cambios, que tome en cuenta lo que necesitamos física, emocional, mental y espiritualmente.

Que sea amoroso con nosotras y nos entregue el ambiente y el «alimento» necesario para nuestro crecimiento, evolución, aprendizaje y florecimiento.

Como si fueras tu propia plantita, que riegas, amas y nutres cada día. Queremos que nuestras plantas crezcan y florezcan, ¿cierto? Queremos el «éxito» de esas plantas. 

¡Hagamos lo mismo con nosotras! Resumen:
– no te juzgues
– entra en ti
– diseña tu futuro próximo alineada con tu REAL ser
– haz lo posible para tu crecimiento y florecimiento.

Espero esto te resuene y que este mensaje llegue a quienes lo necesitan. ¡Por favor comparte con quienes crees que necesite leer!

Un abrazo de amor sincero,
Marwa.



– ¿Te gustó leer?  Hay más en mi blog 🙂

Intensivo primer semestre 2021: Coaching para bailarinas

Te invito a mi grupo de facebook: danza y energía femenina